"La verdadera amistad desafía al espacio y al tiempo. La verdadera amistad está incluso cuando no está. Sobre todo cuando no está."
Y es que nunca he entendido a aquellos que miden la amistad por el número de días que se ven y no por los grandes momentos que pasan al lado de esa persona llamada amigo. Porque la amistad va más allá de un café todas las tardes, va más allá de los reproches por no dejarte ver. Cada vez que me necesites estaré, cuando quieras compartir los mejores momentos de tu vida estaré, y cuando no quieras que esté también estaré. Porque si fuiste capaz de llamarme amigo, serás capaz de entender que estoy contigo en todo momento; y que lo nuestro no debe medirse en algo físico sino espiritual. Porque un amigo es ser consciente de que hay días buenos y días malos, pero que eso, como todo, tiene solución.
Un amigo es arriesgar, arriesgar a confiar a ciegas y tener la certeza de que nunca jamás te va a dejar solo. Es saber que, pase pase lo que pase, un amigo es para siempre.
El amor incondicional es lo que tiene,
perdura en el tiempo
y deja atrás el rencor.
perdura en el tiempo
y deja atrás el rencor.